Serenal investigado por corrupción

El intendente de Lincoln, Salvador Serenal, quien llegó a su cargo pregonando las banderas de la “transparencia”, ya está siendo investigado por el Honorable Tribunal de Cuentas por presuntas irregularidades en la adquisición de una camioneta Volkswagen Amarok -dominio AE584TX-, vehículo que actualmente utiliza el mandatario para uso personal.

La denuncia fue radicada por los concejales del Frente de Todos, Pablo Stola y Alejandra Cataldo, por lo que el organismo encargado de fiscalizar la ejecución de los programas de ingresos y gastos públicos, ya ha comenzado con el procedimiento de investigación sobre el actual Intendente según fueron notificados personalmente.

Los pormenores

La adquisición del vehículo cuenta con varias cuestiones a develar. Habría un desfasaje en el precio del vehículo adquirido por la Municipalidad de Lincoln a Grupo Servicios Junín S.A., ya que el registro del RAFAM emite un gasto por la adquisición de $5.128.064,40 -según la Orden de pago N° 2056 del año 2021- y la factura obrante en el legajo del Registro Automotor N° 2, dominio AE584TX, dice que el mismo Grupo compró a Hauswagen Olavarría S.A. -el 27 de enero de 2021-, en la suma de $4.200.000,00. 

De este modo, al inscribir por un monto ostensiblemente menor, a favor de la Municipalidad de Lincoln la pick up con la consecuente sobrefacturación, se evaden tributos provinciales (impuesto de sellos) y nacionales (emolumentos).

También hubo una particularidad en el objeto social del proveedor, resulta que Grupo Servicios Junín agregó la actividad de compraventa de vehículos pocas horas antes de la adquisición. 

Finalmente, la compra de la pick up marca Volkswagen por parte de la Municipalidad de Lincoln, fue realizada por compra directa violando la normativa vigente establecida por el RAFAM.

El impacto

Esta noticia ha caído como una bomba en varios sectores de la política, sobre todo en el mismo oficialismo, ya que no es la primera vez que denuncian una farsa por parte de Serenal. 

Recordemos el escándalo del Volkswagen Passat manejado por el chofer Pablo Carlini, hoy exitoso productor agropecuario, quien trasladaba caños de cemento a una propiedad privada y que fuera ratificado por el propio “Coco” Santimaría ante la negativa del Intendente. El ex edil había definido ese accionar como una “aberración” y una “falta de respeto a la ciudadanía”.

Según se comenta, ésta no sería la única denuncia que abriría una investigación sobre el actual Ejecutivo, lo que dispara el interrogante ¿Cuántas de estas maniobras habrán sido “tapadas” en el silencio del Concejo Deliberante?

Alguna vez un ex Presidente de la República esbozó una histórica frase que encuadra a la perfección en este caso: “Cuando alguien va a la mesa de uno y entra a hablar de honestidad y entra a hablar de moral y de ética, cuando se va hay que contar los cubiertos”.